Ahora por suerte ni es "dormitorio", ni es el "más allá" y se hacen otras cosas aparte de empanadillas.
Vivo desde el año 1992, aunque familiares y amigos viven aquí desde hace mucho más. Esta ciudad ha cambiado mucho, mucho, mucho. Tiene tren, metro, universidad y dos hospitales: uno público y otro de "gestión mixta pública-privada" que seguro que también lo será. Sino tiempo al tiempo. Se han instalado empresas importantes como Repsol o Ascensores Thysen. Tiene un museo de arte contemporáneo al que se le empieza a reconocer. En fin, es una ciudad con futuro.
A parte de este rollo, digo que en Móstoles es un buen lugar para vivir , pero también para correr. Y de ello hablo hoy, de los lugares por donde correr en Móstoles.
Hay muchas personas que desconocen Móstoles, no pasean por la ciudad. No conocen el Parque Liana, menos el Parque Prado Ovejero y nada de nada el parque que hay en la ampliación de Móstoles Sur, paralelo a la calle Osa Mayor y límite de la ciudad. Este parque está pegado al campo y limita con los pueblos de Moraleja, Arroyomolinos y Fuenlabrada. Cuenta con dos lagos, buen punto de partida para acercarse a Moraleja del Medio, Arroyomolinos o Loranca. a través de sus muchos caminos rurales bien paseando tranquilamente, montar en bicicleta o nuestra afición favorita: correr.
Tres buenos lugares donde echar una carrerita. Cada uno diferente a los demás, pero ni mejor ni peor. Mostoleños: intentad conocerlos y seguro que disfrutareis.
Pero sin lugar a dudas, el parque de referencia es el Parque de El Soto. Me encanta. Sin lugar a dudas el preferido de los mostoleños. Parque de recreo, de acontecimientos tanto deportivos como de peregrinación, pues es habitual la celebración de romerías.

El Soto es el centro base de los corredores mostoleños. Hasta aquí llegamos todos los locos del running. Tenemos diseñado un circuito cercano a los 4 kilométros, donde alternamos el recorrido plano con una ligera cuesta y curvas y contracurvas. Ademas damos la vuelta a un lago. Hay dos fuentes para hidratarnos o mojarnos la cabeza cuando el calor aprieta. No es un recorrido caluroso, pues alterna sol y zonas de sombras. Y finalmente hay aparatos de gimnasia, de esos que ahora hay en toda España (de fabricación china), donde podemos estirar o muscular. Y si quieres relajarte un ratio, hay una buena pradera donde tumbarte. Bueno siempre y cuando no estén jugando al fútbol los cientos de chavales que se juntan allí para pelotear. Y es que esta pradera, es mimada por los jardineros : no es el césped del Bernabeu, pero siempre está cuidada.
En El Soto además de correr puedes pasar una buena jornada con tus amigos o familia, hay muchas mesas para comer, beber o jugar a las cartas. En verano y por la noche en un lugar muy solicitado para quitarse el calor nocturno, la temperatura baja respecto al centro de la ciudad y somos muchos los que nos quedamos hasta las 3 de la mañana (cuando no hay que trabajar al días siguiente) alargando la cena y los cubatas. O zumos y cerveza "sin" para aquellos que no beben alcohol.

En el parque también hay unas cuantas zonas de juegos infantiles y para mayores.
Es el parque más conocido, pero no por ello conocido por todos los mostoleños.
En cuanto a los corredores, somos muchos los que día a día pisamos su arena para mantenernos en forma mental y físicamente. Porque correr no solo es para estar en forma física. Es mucho más que eso. Cualquier corredor lo podrá explicar.
En este parque hay corredores y andadores a todas horas. En verano salgo a correr a primera hora de la mañana , sobre las seis menos cuarto y cuando estoy entrando en él, ¡ oye, ya hay corredores saliendo! Este parque no descansa, y lo corredores tampoco.
Como digo, el principal lugar de actividad física en Mostoles es en El Soto. No solo por el parque sino porque es aquí donde están ubicado los Campos de Iker Casillas. Campos de hierba artificial ( como ya viene siendo habitual en toda la Comunidad de Madrid) , también se encuentra el campo de fútbol del Móstoles, equipo que la máxima categoría en la que ha jugado fue la 2ª división B, y que ahora navega sin pena ni gloria en la Segunda Regional. (no me importa que me corrijas).¡Envidia nos da el Alcorcón!.
En El Soto también está muriéndose el Polipedortivo de El Soto, donde sobreviven de mala manera las pistas de tenis, la piscina municipal y la pista de atletismo con sus parches en el tartán pero a la que asisten miles de aficionados, opositores, atletas profesionales y chavales y chavalas de corta edad que aman y viven el atletismo.
Este polideportivo esta muriéndose desde hace años. El ayuntamiento hace poco por él porque ha apostado por el nuevo pabellón de cristal. Parece ser que se llamara Andrés Torrejón,exalcalde antifranchute.
Pabellón de difícil parto. Lleva más de seis años de retraso y no se ha puesto fecha nacimiento. El crack inmobiliario le ha propinado un fuerte golpe y sufre para nacer. Se dice que para las próximas elecciones municipales se inaugurará. Lo mismo que en las anteriores, y la anteriores. El caso es que ahora hay apenas quince personas trabajando en el edificio. Queda mucho tiempo para que los mostoleños podamos correr, nadar, saltar, ver deporte en él.
Su fachada es de cristal. Hace poco aparecieron unos cuantos cristales rotos. Cristales nada baratos y se supone que resistentes al calor y al frío. Las habladurías dicen que no aguantaron la temperatura y estallaron. Si es así ¡vaya chapuza!.
En cualquier caso, ya tenemos en Móstoles el monumento al pelotazo y la crisis. No hay pueblo en España que no tenga el suyo. Poco a poco aparecen monumentos como aeropuertos sin aviones, puentes resbaladizos en el norte, puertos de mar sin barcos, balnearios cerrados y abandonados por falta de demanda en pueblos de cincuenta personas, parques temáticos en bancarrota, líneas de tren sin viajeros. Nosotros en Móstoles tenemos este polideportivo que viene a ser como la catedral de Gaudí en Barcelona, pero también la línea de tren Móstoles-Navalcarnero. Tenía que estar funcionando ya hace tres años y ahí está abandonada. Pobres ciudadanos, paganinis de sueños políticos.
Retomemos la actividad física. En Móstoles además de los parques señalados contamos con muchos caminos rurales para correr. Uno muy usado es sin lugar a dudas la vía Verde del Ferrocarril que iba a Almorox. Este línea partía de la Estación de Delicias en Madrid y llegaba Almorox en Toledo, pasando por Móstoles, Navalcarnero y Villamanta. Parte de su trazado fue el que se utilizó para traer el tren de cercanías a Móstoles y que supuso la verdadera transformación de la ciudad.
La idea llevaba tiempo en el cajón de los diferentes alcaldes que ha tenido esta ciudad y finalmente fue llevada a cabo por el alcalde popular Esteban Parro. Habrá que agradecérselo. También suenan demandas de sobrecoste. Eso se verá en tribunales, pero lo que se ve ahora es ese buen trayecto rectilíneo de apenas 7 kilómetros y que es una delicia para corredores, manchadores, y ciclistas. Finaliza en el Puente de Hierro que atraviesa el río Guadarrama, sucio, contaminado y poblado de chabolas. (hablaremos en otra ocasión de ello). Este puente en su momento era muy peligroso por su estado de abandono total. Se cruzaba por un arcén de apenas un metro de ancho y todo el centro del puente estaba sin suelo. El arcén y el centro del puente estaban separados por un alambrada medio rota. Nos hemos jugado la vida cruzando de un lado al otro, sobre todo cuando íbamos con la bicicleta. Luego dirán que correr no es deporte de riesgo.
Bueno, ahora a esta vía verde le están plantando árboles. Proyecto de árboles. Unos crecerán otros no. Y otros crecerán pero en la parcela de algunas personas que los han arrancado. ¡Cómo somos el género humano! Arramplándo con lo de todos. ¡ Qué pena!.
Esta vía verde, una vez cruzado el puente del rio de hierro citado, la podemos alargar hasta Navalcarnero otros cinco kilómetros.Que pena que el resto de municipios no hayan querido correr con los gastos de arreglo de su trayecto!!!
Otros recorridos para correr es el circuito del Butano. Llamado así por pasar por las antiguas instalaciones de almacenamiento de las botellas de gas butano. Por la vía verde se llega hasta la urbanización Guadarrama (no confundir con el poblado chabolista), y una vez en la urbanización coger la carretera asfaltada que sube a todo lo alto de dicha colonia. Una rampa infernal de 250 metros escasos pero de un nivel positivo de subir con piolet. Luego se suaviza, y durante 2 km de continua ascensión suave se llega hasta la vaquería. Aquí las vista de Móstoles y su alrededor son excepcionales. En los días despejados se contemplan los pueblos que circundan Móstoles, además de los pinares de Navalcarnero, Sevilla La Nueva, Brunete y la Sierra de Guadarrama.
Y como no podía ser de otra manera y negativa : la boina de contaminación de la gran ciudad de Madrid que a veces llega a nuestra ciudad.
Por estos campos corremos muchos "cabras" mostoleños, y también ciclista y caballistas (más el caballo que el jinete). Una vez arriba del todo, en la vaquería se abre un amplio abanico de posibilidades de continuar la carrera: bajar al río, ir a los pinares de Brunete, llegar hasta Villaviciosa, etc.
Otro recorrido muy frecuentado es el camino que conduce hasta el pueblo de Arroyomolinos, pasando por la vaquería de los Combos y que continua luego paralelo al arroyo del mismo nombre y que entra en el pueblo por un parque precioso. El camino es una via pecuaria donde no transitan vehículos. Recorrido sin lugar a dudas recomendado por su belleza,dureza y acompañado, pero ojo: ¡sin agua!.
En fin, estos son los lugares más frecuentados por los corredores mostoleños. Pero no por ello los únicos.
Un parque para correr y durillo es el Parque Prado Ovejero. Cerca del Polideportivo de los Rosales. Vaya timo que dieron a los vecinos: les han hecho un polideportivo que ocupa menos de lo que iba en proyecto. El resto , como no , son viviendas.
A veces cuando dispongo de poco tiempo y no quiero alejarme mucho de casa, corro por el Parque Liana. Precioso parque con buen pinar. Hay un recorrido de apenas 2 kilometros muy frecuentado y en el que puedes estirar perfectamente cuando finalizas en sus múltiples aparatos amarillos chinos de los mayores.






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